miércoles, mayo 07, 2008

Mi muerte



Mi muerte es testaruda,
Se empecina en asesinar un cadáver que le grita:
¡No existo!
Me eclipso, viejo,
Entre la muchedumbre de una plaza pública,
Y las palomas me evitan, rechazando mis migajas.
No me reconozco ni en mi propia sombra.
Tranquilo
¿Por qué simplemente no morir?
Basta, tranquilo,
Ya vendrá la amante celosa del sueño.


PD: Soy un optimista empedernido jaja

0 de los sospechosos de siempre: